El libro de firmas es otro de los detalles que marca diferencias en una boda. Como el vestido o el chaqué es un elemento más que define la personalidad de los novios y los invitados, y que además puede servir para pasar un buen rato en la ceremonia. Y lo que es mejor, sirve como recuerdo imborrable de una velada inolvidable.
Hay por supuesto,muchas formas de organizar un libro de bodas, que para empezar ni siquiera tiene por qué ser un libro. En el blog de La Trajería te contamos varias formas originales de preparar este recuerdo.
1.Piedras de boda. Los invitados pueden dejar su mensaje o escribir su deseo para los contrayente en piedras, o en conchas marinas si la boda es en la playa. Bien recopiladas luego, quedan genial como elemento de decoración.
Con una polaroid
2. Las fotos de papel en realidad nunca pasan de moda. Sacarse una foto el mismo día de la boda y pegarla al instante en el libro de firmas es posible gracias a tecnologías como Instax Mini de FujiFilm.
Globo de firmas
3.Una bola del mundo para estampar las firmas. Ideal si tienes muchos invitados internacionales.
Corchos de firmas
4. Otro sitio original para firmar son los corchos de las botellas. Se pueden hacer luego composiciones muy originales con ellos.
5. Iniciales firmadas. Tan sencillo como poner unas letras gigantes donde todos estampen su firma.
6. Firmas a máquina. Para darle un toque retro. Puedes recuperar una máquina de escribir tarjetas de recuerdo y que -aquellos que todavía sepan- mecanografien su mensaje. Para algunos será una experiencia nueva, para otros un guiño nostálgico.
7. Discos de firmas: para los amantes de la música una opción es firmar en discos de vinilo. Ideal para alegrar después cualquier rincón de la casa.
