El otoño es una de las estaciones más bellas, pero… ¿tiene sentido casarse en Halloween? ¿Es demasiado friki o una idea divertida? ¿Es de mal gusto o se trata de la fecha perfecta? Por extraño o sorprendente que les pueda parecer a algunos, cada vez es mayor la gente que elige la víspera del 1 de noviembre para contraer matrimonio.
Razones no les faltan a los defensores de esta celebración, que pasa por ser una de las más populares del mundo. De sobra está comentar, cuando faltan pocos días para la cita, el éxito que esta costumbre de origen celta está teniendo en nuestro país. Es imposible pasearse por las calles de Madrid, de Valencia o de cualquier ciudad sin encontrarte los locales repletos de calabazas, máscaras, menús Halloween, camareros disfrazados o escobas voladoras. Hasta las telarañas, tan criticadas el resto del año, tienen cierto glamour en esta época…
Y es que, tal como lo entendemos en nuestros días Halloween es una fiesta para reírse del miedo. Para bromear con los temores ancestrales y aprender desde niños a perderles el respeto y enfrentarnos a ellos desde una actitud positiva, haciendo de todo ello un juego. Y a fin de cuentas, ¿hay algo que nos produzca más terror que el matrimonio?
Cierto que casarse es una de las cosas más bonitas que vamos a hacer en la vida, un momento muy especial y romántico y una gran fiesta que no olvidaremos nunca, pero… ¿quién no ha sentido alguna vez al menos un leve momento de pánico? Quizás por ello la idea de casarse en Halloween adquiere un sentido que va más allá del friquismo y la coincidencia de fechas. Es un ejercicio de buen humor tremendamente divertido.
Porque eso es lo que mayormente se necesita para casarse en estas fechas. Una dosis de ingenio y buen humor con la que sorprender a los invitados y, sobre todo, divertirse. Vencer al miedo riéndose. Desde las invitaciones a los cócteles, pasando por la decoración. Y por supuesto, el vestuario. No en vano, todos recordamos a un impecable Drácula vistiendo de riguroso frac en la mayoría de las representaciones. Vampiro sí, pero con clase.
Si os gusta la idea y pensáis que Halloween puede ser una buena fecha para casaros aquí os dejamos unas ideas que, cuando menos, os harán sacar una sonrisa. Y es que la originalidad no tiene límites a la hora de preparar una boda deliciosa y terrorífica.